La
Historia de la filosofía se divide en 4 períodos fundamentales: la filosofía
antigua, la filosofía medieval, la filosofía renacentista y moderna, y la
filosofía contemporánea.
1.
Filosofía Antigua (VI a. C.-IV d. C.):
Los inicios de la filosofía se sitúan en
Grecia en el siglo VI a. C. Con el “paso del mito al logos” se pasa de
pensar la realidad y la naturaleza de manera fantástica a pensarla de manera
racional. Los fenómenos naturales ya no se explican a través de dioses, sino
que se trata de estudiarlos desde ellos mismos. Se abandona el antropomorfismo. La cuestión
fundamental que se trata en la filosofía antigua no es otra que la physis o naturaleza. Se tendrá
curiosidad por saber sus causas, por saber cuál es ese elemento o elementos que
hacen que la naturaleza sea como es. El arché
será ese elemento que cause todo lo demás, será el origen de la naturaleza. Los
representantes de esta etapa de la filosofía son los llamados Presocráticos,
entre los que cabe destacar a Tales de Mileto, el primer filósofo
conocido, que defiende el agua como
ese elemento causante de todos los demás elementos de la naturaleza, a esta
conclusión llega a través de la observación. Seguidamente aparece Anaximandro
de Mileto, cuyo arché será el conocido como ápeiron o lo Indeterminado.
Su reflexión es la siguiente: ¿Cómo es posible que algo determinado como puede
ser el agua sea causa del mundo determinado también? Dice que tiene que haber
algo infinito, indeterminado, inmutable y eterno que sea origen de lo
determinado, del mundo. El último de los milesios es Anaxímenes de Mileto y
defiende de nuevo algo determinado como arché, que será el aire, ya que, por observación, llega a la conclusión de que todos
los seres vivos necesitan el aire para vivir. A partir del siglo V a. C., se da
el conocido “giro antropológico”, protagonizado por Sócrates y
los conocidos como los sofistas. Esto significa que la reflexión ahora
se orienta un poco más hacia el ser humano, aunque no se pierde la
perspectiva de la physis aún. Las cuestiones que le interesarán a Sócrates
tienen que ver directamente con el ser humano y son cuestiones como “la
justicia”, “el bien”, “la verdad”, “la belleza”, etc. A partir de Sócrates, nos
encontramos con Platón (y su mundo de
las ideas), Aristóteles y con movimientos filosóficos como el estoicismo
y epicureísmo, la filosofía helenística y el neoplatonismo. Este período
recibe el nombre de período ontológico (ciencia
del ser), ya que, como hemos visto, el objeto de estudio fundamental es la
naturaleza, el ser, lo que es.
2.
Filosofía medieval (V-XV):
Con el fin del Imperio romano (siglo
V), y una vez consolidado el cristianismo como la religión oficial, la cuestión
fundamental ya no es tanto la physis como todo aquello que tiene que ver con Dios, en cuanto a su naturaleza y su
existencia. La llamada Escolástica fue la corriente teológico-filosófica
dominante del pensamiento medieval, tras la patrística de la Antigüedad tardía, y se basó en la
coordinación entre fe y razón, que en cualquier caso siempre
suponía una clara subordinación de la razón a la fe. Sus pensadores más
destacados son: Agustín de Hipona, San Anselmo, Averroes, Maimónides, Tomás de
Aquino y Guillermo de Ockham, máximo exponente del conocido como nominalismo[1].
A este período se le conoce como período
ontoteológico, ya que la filosofía, sin perder su primer objeto de la
physis, se ocupa ahora principalmente de Dios.
3.
Renacimiento y filosofía moderna (XV-XVIII)
a)
Renacimiento (XV-XVI)
Nos situamos en una época de
transición en la que, a pesar de no haber teorías filosóficas relevantes,
representa un punto de inflexión en el desarrollo del pensamiento de la
humanidad. El Renacimiento se caracteriza por una vuelta a los valores
griegos y una vuelta a la subjetividad. En el Renacimiento se
encuentran dos hitos importantes que son:
-
El
Humanismo: actividad de reforma educativa y cultural. Se pone en primer plano
la educación total del sujeto.
-
Revolución
científica: pretende eliminar el argumento de autoridad sobre el que se basaban
las investigaciones anteriormente y se impone un nuevo método científico que es
experimental. Caben resaltar las figuras de Copérnico, Galileo y Newton. El
suceso fundamental es que se pasa del geocentrismo al heliocentrismo y
esto hace que cambie radicalmente la manera en la que se concebía el mundo
hasta el momento.
b)
Filosofía Moderna (XVI-XVIII):
La modernidad en filosofía destaca
principalmente por su objeto de estudio, que ya no es tanto Dios (debido a La
Ilustración –s. XVIII- se empieza a abandonar la idea de que Dios y la fe
deben acompañar a la reflexión) ni la naturaleza, sino que ahora se centra en
la posibilidad de que el YO conozca.
La pregunta entonces fundamental es: ¿cómo
es posible el conocimiento?; ¿cómo es posible el acceso a la realidad a través
del conocimiento? La relación entre el Yo y la naturaleza se da a través
del conocimiento. Se le da una importancia nunca antes conocida al YO y a la
relación que éste guarda con el mundo que le rodea y consigo mismo. Es por ello
por lo que esta filosofía es, fundamentalmente epistemología. Surgen dos
corrientes enfrentadas y que, a su manera, dan respuesta a cómo conoce el ser
humano. De un lado, tenemos el racionalismo,
que nos dice que hay ideas innatas en nuestra conciencia y que no dependen de
la experiencia para ser verdaderas. Asimismo, afirma que sólo a través de la razón
se puede llegar a verdades universales. Su mayor representante es R. Descartes (1596-1650), cuya frase
representativa es “Pienso, luego existo”. De otro lado, nos encontramos con el empirismo, que defenderá que las ideas
que el sujeto tiene proceden mayoritariamente de la experiencia sensible, o lo
que es lo mismo, que los sentidos nos llevan al conocimiento del mundo y
de la verdad. Como representantes destacamos a J. Locke (1632-1704); G.
Berkeley (1685-1753); D. Hume
(1711-1776). Teniendo esto en cuenta, I.
Kant (1724-1804) presenta una alternativa al empirismo y al racionalismo
que, según su punto de vista, se quedan en una parcela mínima de la realidad
olvidando la otra. Esta alternativa será conocida como criticismo, que trata de dejar claro que, tanto la experiencia como
la razón son importantes en el acto de conocer. Kant propone la sensibilidad y el entendimiento como dos polos necesarios para que sea posible el
conocimiento humano. El ser humano, por tanto, no es un ser pasivo que recibe
información de la experiencia, ni tampoco puede ponerla en duda constantemente.
4.
Filosofía contemporánea (XIX-hoy):
En el siglo XIX se dan unos pensadores
que tienen algo en común: la crítica a todo lo anterior. Sospechan sobre lo que
se ha dicho anteriormente sobre alguna parcela de la realidad. Ellos no se
creen nada de lo anterior y fundamentan sus críticas. Este grupo de tres
filósofos que sospechan de lo anterior se enmarcan en lo conocido como “filosofía o filósofos de la sospecha”.
En primer lugar nos encontramos con Karl
Marx (1818-1883) que va a sospechar de los sistemas de producción que
imperaban en el momento que, a su juicio, eran injustos, desfavoreciendo a los
trabajadores y enriqueciendo a los patrones (dueños, jefes) de las fábricas. La
solución que propone es la revolución (esa debe ser, a su juicio, la labor de
la filosofía), cambiando así las relaciones de explotación de los trabajadores.
Sólo así se podrá transformar la sociedad. En segundo lugar nos encontramos con
Friedrich Nietzsche (1844-1900), el
cual sospechaba de los valores tradicionales, de cómo era concebida la vida en
aquel momento, de los valores decadentes que favorecían la creencia en una vida
después de la muerte que ignoraba la presente. Esto sólo favorecía un espíritu
sometido. Él proponía darle la vuelta a los valores y defendía que había que
vivir con intensidad esta vida, la única que teníamos. Por ello su filosofía
recibe el nombre de vitalismo. El
último de los filósofos de la sospecha es Sigmund
Freud (1856-1939). ¿Cuál va a ser su sospecha? Él va a sospechar de la “conciencia”
que tanto defendían los modernos. Según él, las bases de quiénes seamos se
encuentra en una instancia más oculta de la psique (mente) humana que es el
inconsciente. Propone el psicoanálisis
como método para investigarlo y curar enfermedades mentales, como la neurosis.
Es considerado el padre del psicoanálisis.
En el siglo XX se dan varios
movimientos filosóficos como la fenomenología y dos giros importantes en el
pensamiento, como son: el “giro
lingüístico”, en el que gran parte de la reflexión filosófica se centra en
el lenguaje y la importancia del mismo para interpretar la realidad. Asimismo,
también hablamos del “giro práctico”,
en el cual la reflexión ética es la protagonista para interpretar y comprender
la realidad en cuanto realidad humana y su vida en sociedad.
[1] Nominalismo: Doctrina que niega la existencia objetiva de los universales, considerándolos como merasconvenciones o nombres, en oposición a realismo y a idealismo.